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viernes, 27 de febrero de 2015

EL DULCE ENCANTO DE LA REBELDIA

EDITH WHARTON EN 1905
(Imagen sacada de Internet)



Cuando me haya ido, recuerda mi pelo,
no por la luz que solía mantener,
sino por su tacto, que allí enredado,
se ha convertido en oro joven.

Recuerda mis manos, que no eran más suaves,
claras o bonitas de lo habitual,
hasta que tanto durmieron,
cálidas y cercanas en tu posesión.

Recuerda mis ojos, que solían mentir
piscinas ciegas con los restos esparcidos de verano.
Borraste la deriva, pero en su cielo
no colgaste ninguna imagen salvo la tuya.

Recuerda mi boca, que no sabía
que un beso se acuna y emprende el vuelo.
Pero ondeaba como una rama colgada del nido
cuando tú la tocaste como la primavera.


Estos versos pertenecen a un poema de Edith Wharton que nunca llegó a publicar, y que aparece en el libro que quiero comentarles, su título:"EDITH WHARTON-Una Mujer Rebelde En la Edad de la Inocencia" de Jorge Freire. Libro que ya les adelanto, es una auténtica delicia.
A través de sus páginas el señor Freire nos va desvelando la biografía de esta autora. Hace un recorrido por su vida y nos presenta también, como es lógico, su obra. Pero además hace un análisis de la sociedad, de la política y de la economía del tiempo que le tocó vivir a Edith Wharton y a otras muchas mujeres, algunas no tan privilegiadas como ella. A ella el pertenecer a una clase privilegiada le dio una serie de facilidades, pero no le privó de situaciones más o menos duras relacionadas con los sentimientos. En eso, ricos y pobres nos parecemos bastante.
Edith Wharton tuvo también que enfrentarse a la falta de libertad que una sociedad, en algunas situaciones, bastante pacata, le imponía. "Nada como una revolución para hacer a la gente conservadora" ironizaba la señora Wharton. Ella como nadie fue capaz de reflejar en sus obras, de una manera elegante, la hipocresía de la sociedad que le tocó vivir.
En esta obra descubrimos que el primer libro de la señora Wharton fue un innovador ensayo sobre diseño de interiores, ilustrado por el arquitecto Ogden Codman. En él se aprecia, y cito textualmente: "que los principios estéticos de la autora son los mismos que animaron a los antiguos griegos: luz, proporción y forma."  Características que, de alguna manera, aplicó también a sus novelas.
Éste es un libro que se detiene en sutiles detalles en cuanto a la autora, sus gustos, su manera de entender la vida. Jorge Freire me ha sorprendido gratamente porque parece haberla analizado con un delicado y potente microscopio. Llama la atención que sea un hombre, y joven además, el que haya escrito este libro. Minuciosa, elegante... son sólo algunos de los adjetivos que se me ocurren para describir esta obra. Obra con la que, personalmente, he disfrutado y sobre todo, aprendido un montón. Además ha tenido el acierto de encabezar cada capítulo con frases sacadas de obras de otros escritores. Frases que sirven de presentación del contenido del capítulo en cuestión.
Un libro como digo, lleno de aciertos y datos interesantes, sobre el tiempo y la obra de Edith Wharton. Datos que nos hacen comprender más aún su creación literaria. 
De verdad, no se lo pierdan.

6 comentarios:

  1. Mmm...¡qué bien empezar la mañana con taza de té y un poema de Edith W.!! Me ha gustado mucho. Creo que pasee por él de forma desapercibida y ahora he podido disfrutarlo aún más.

    Gracias, ha sido un placer. Tomaré nota del libro de Freire y lo ojearé.
    Besos

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    1. Es una fantástica manera de empezar cualquier día, con una buena taza de té y un buen poema cerca. Estoy segura que cuando abras el libro, no vas a poder conformarte con darle una simple ojeada.
      Un abrazo.

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  2. La vida de una mujer rebelde e inteligente, Edith Wharton. Ese libro que nos aconsejas le hace justicia. Un abrazo, amiga caminante.

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  3. Fue una mujer siempre a la búsqueda de dos cosas importantes para ella: la libertad y la belleza. Jorge Freire nos lo descubre en este libro haciendo un estudio de la personalidad de esta escritora, e invitándonos a hacer un recorrido por la sociedad que le tocó vivir.
    Un abrazo.
    P.D. En estos días, he intentado varias veces dejar un comentario en tu blog, pero cuando quiero tener acceso a él, hay algo que se bloquea y no me lo permite, y eso que ahora entro por medio de Gloogle Crone.
    ¡Ayyy, la tecnología y sus enredos!

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  4. Tengo que decirte, que descubro hoy a esta escritora, gracias a tí. Y me alegro por esto que pones aquí y porque "La edad de la inocencia" es una historia, en película, que la he visto varias veces y me encanta. Me parece de una delicadeza y fuerza a la vez maravillosa. Me imagino que será muy interesante también leer el libro.
    Tienen mucho mérito las mujeres que en una actividad u otra van contra corriente, para conseguir lo que quieren. La razón, la mayoría de las veces, el hecho de ser una mujer, es triste, pero así es.

    Gracias, Dorca.

    Besos.

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    1. Te recomiendo que leas cualquiera de las novelas de esta autora. Es sorprendente la capacidad que tenía esta mujer de describir los detalles más pequeños de cualquier decorado, y la misma minuciosidad demostraba a la hora de diseccionar las psicologías de los personajes. Ella pertenecía a la clase alta, sin embargo supo mostrar también las miserias de la clase baja. Que, pensándolo bien, son prácticamente las mismas.
      Si bien es verdad que a raíz de la película que mencionas, su novela del mismo título volvió a tene éxito, te recomiendo que leas títulos como: "Xingú" o "Las Hermanas Bunner", ambas novelas cortas. Otra que me ha parecido siempre impresionante, ésta un poco más larga que las anteriores, es "Ethan Frome".
      Magnifica escritora.
      Un abrazo grande.

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